miércoles, 1 de agosto de 2012

Mies van der Rohe, Crown Hall






El Crown Hall es uno de los 20 edificios diseñados por Mies van der Rohe para el Instituto Tecnológico de Illinois (IIT) en Chicago. Esta es la pieza central de un masterplan para el campus fundado en 1940 que ocupa aproximadamente 50 hectáreas, presentando la mayor concentración de obras de Mies en el mundo.
Su enfoque es sin duda innovador, pero es el arte en la ejecución que hace del campus de IIT un destino internacional para los entusiastas de la arquitectura moderna. Aquí, Mies van der Rohe ha elaborado y perfeccionado la gramática del lenguaje arquitectónico moderno, sus ideas, estructuras, proporciones y geometría.
El Instituto Americano de Arquitectos nombró al IIT una de las obras más significativas del siglo XX. El Crown Hall, es el más célebre de sus edificios construido en 1954 con una innovadora tecnología combinando acero y vidrio.
El plan original de Mies para el campus universitario estaba centrado en dos edificios principales, un recinto para estudiantes y una biblioteca. No obstante, tuvo que adaptar sus planes a las restricciones económicas. No fue hasta la prosperidad posterior a la Segunda Guerra Mundial cuando el arquitecto pudo crear sus grandes monumentos modernistas, entre ellos el Crown Hall, un edificio para alojar la Facultad de Arquitectura.









Mies diseñó un nuevo edificio mucho más ambicioso y atrevido que el existente en un extremo del campus. Sin embargo, durante su construcción, tuvo que enfrentarse a numerosos obstáculos, como la resistencia inicial del Consejo Universitario quien pensaba que era una obra muy costosa. Superado esto, se presentó la oposición de los inspectores de construcción de la ciudad quienes solicitaron que las columnas fueran a prueba de fuego, por lo que debían estar recubiertas con concreto. Como todo el diseño de Mies se hubiese perdido optó por registrar el edificio como almacén, evitando así tener que cumplir las normativas de resistencia al fuego.
Otro problema surgido durante la obra fue un incendio que ocurrió al calentar el concreto ya que la construcción se desarrolló en invierno a muy bajas temperaturas y el material se congelaba.
La última objeción que el arquitecto enfrentó fue por las escaleras diseñadas sin pasamanos. Al recibir la visita del inspector y comprobar que el recinto no funcionaba como almacén como había sido clasificado, indicó que por seguridad de los alumnos debían colocarlos. Hoy en día, el diseño de los pasamanos destaca por su elegante minimalismo.
Superados todos estos obstáculos, en 1956 se terminó el edificio donde Mies proyectó sus dos obsesiones: máxima transparencia y mínima estructura.
En agosto de 2005, se realizó una importante renovación que recuperó el edificio después de muchos años sin mantenimiento. Se mejoró su accesibilidad y funcionalidad, el rendimiento energético y medioambiental, y se hizo una restauración general que acercó al Crown Hall a su imagen original de 1956.

El Instituto Tecnológico de Illinois está ubicado cuatro millas al sur del centro de Chicago. El Crown Hall se sitúa prácticamente en el centro del campus, muy cerca de la estación de metro y del estacionamiento principal, por lo que es uno de los edificios con mejor ubicación dentro de la universidad. Esto se debe a que Mies lo consideró como una de sus obras maestras y uno de los hitos del IIT de Chicago.
Las calles que rodean el edificio dentro del campus están separadas por áreas verdes que lo aíslan de posibles ruidos.
Cada edificio está separado del otro. Todos ellos promedian una altura de 3 o 4 niveles lo cual garantiza que no se obstruyan las vistas ni la iluminación natural. Desde el interior de los edificios se puede ver al norte los rascacielos de Chicago.
Las cuatro caras libres del edificio permiten la entrada de luz y el aprovechamiento de las vistas. El Crown Hall está orientado de sur a norte. La entrada principal se encuentra en la fachada sur, permitiendo contemplar el taller al entrar, con el perfil de la ciudad de Chicago como vista de fondo en las ventanas de la fachada norte. El edificio también tiene esta orientación para que la iluminación natural principal sea luz norte-sur y no este-oeste, que por lo general es más intensa y difícil de controlar hasta llegar a resultar molesta en muchos casos.

El edificio se configura como un espacio libre contenido en una forma rectangular en dos niveles.
Es un volumen exento con sus cuatro fachadas de cristal, rodeado de una amplia zona verde, con grandes árboles, principalmente en la fachada sur. El vidriado en todas sus caras permite que la Facultad no le dé la espalda al resto de los edificios, respetando el contexto.
Se caracteriza por una estética de simplicidad industrial, claramente expuesta en sus marcos de acero.

El edificio se divide en dos niveles: la planta principal, configurada como un gran espacio; y un nivel semi enterrado donde se ubican las oficinas, salones y servicios.
La planta principal, que ocupa el 50% de la superficie del edificio, compone un único espacio acristalado dedicado al estudio de la arquitectura. Mies lo calificó como un “espacio universal” destinado a ser totalmente flexible en su uso. Las pocas divisiones que presenta son móviles, realizadas con paneles livianos que permiten cambiarlos de lugar adecuando el espacio según se requiera.
La vegetación que rodea el edificio produce un entorno calmo para trabajar, ayuda a regular la luz del sol sobre las fachadas de cristal y hace que las vistas sean mucho más agradables para los usuarios dentro del edifico. El edificio en si está pensado para el beneficio del los usuarios y no solamente como un elemento estético como se puede llegar a pensar en muchos casos si no se ha estudiado la obra.
Las fachadas de cristal crean un ambiente abierto, dando la sensación de estar trabajando al aire libre dentro de un parque, con la vista hacia los rascacielos de Chicago y la vegetación.

La cubierta de 36 x 67 metros se apoya en una serie de columnas exteriores de acero que se ubican tangentes al cerramiento y se relacionan por medio de jácenas de canto de acero visibles sobre la cubierta. Está técnica permitió a Mies cubrir importantes luces sin necesidad de apoyos intermedios y manteniendo un grosor de forjado estándar.
La planta semienterrada está apoyada en una trama de columnas de 6 x 9 metros.

Los materiales principales son acero, hormigón armado y vidrio.
En la restauración de 2005, la pintura original de la estructura de acero fue reemplazada por un recubrimiento negro sin plomo. El acristalamiento fue sustituido en su totalidad por paneles que cumplen con los requisitos de carga de viento. El revestimiento de travertino en la terraza sur fue sustituido. Los paneles interiores de madera y los armarios fueron reemplazados. Se añadieron aparatos eléctricos y cableados a la planta principal.

























No hay comentarios:

Publicar un comentario