Nicolás Moyano, Nube Verde

Arquitecto: Nicolás Adolfo Moyano Retamal, Proyecto de Título de la Escuela de Arquitectura de la Universidad de Talca
Ubicación: Avenida El Almendro Nº 087, Comuna de Linares, Región del Maule, Chile
Profesor Guía: Mauricio Ramírez Molina, Arquitecto
Superficie: 70 m2
Proceso de Diseño: Abril 2011 – Septiembre 2011
Proceso de Construcción: Enero 2012 – Marzo 2012
Fecha de Entrega de la Obra: 22 de Marzo de 2012
Comisión de Profesores: Mauricio Ramírez Molina, Eduardo Aguirre León, Fernando Montoya Giordano y Jaime Latorre Soto
Cálculo Estructural: Patricio Lara Ditzel, Ingeniero Civil
Inspección Técnica de Obras: Cristián Palma Valladares, Arquitecto
Materialidad: Madera, Pino Impregnado, Acero y Hormigón
Costo: 7 Millones de Pesos Chilenos
Financiamiento: Guillermo Ortega Jordán y Aporte de Privados
Construcción: Pedro Avendaño Valdés, Héctor Ortiz Soza, Víctor Pinilla Soto, Nicolás Moyano Retamal y Luis Moyano Quintana
Fecha: 2012

El Hogar
El Hogar San Camilo pertenece a la congregación fundada por Camilo de Lelis, patrono de los enfermos, fundador de la Orden de los Camilos. Se ubica Linares y es fundado el año 2000 en las antiguas dependencias del Hogar de Cristo, llevan 12 años de atención a ancianos enfermos, desvalidos y abandonados, siendo administrado por cinco Monjas Camilas.

Calidad de Vida
Asumiendo que estamos envejeciendo cada ves más rápido, nos damos cuenta que una vida y un cuerpo sano no dependen solamente de cuidados, atenciones medicas, terapias y rehabilitaciones, sino que de lugares de esparcimiento y relajo, donde puedan sociabilizar y realizar actividades al aire libre que les agraden y distraigan. Si logramos abstraerlos de la rutina gracias a nuevos espacios comunes, generar recorridos y lugares de estar, los cuales despejen sus mentes y marquen diferencias en su diario vivir, estaremos aportando en una buena manera a esta etapa tan importante en la vida.

“Calidad de vida” es un concepto complejo que involucra variables físicas, psicológicas, ambientales, sociales y culturales.

Ya estando completamente inmersos en este tema, dándonos cuenta del mundo en que viven estos ancianos y que muy difícilmente podremos cambiar a corto y mediano plazo en Chile, nos planteamos ciertas preguntas que nos pueden ayudar a entender el problema, localizar sus fortalezas y ver de donde nos podemos aferrar para lograr mejorar en algo la calidad de vida de estas personas, no solo dentro de hogares de reposo, sino que cualquier anciano del país y del mundo: ¿Qué hacer para recuperar la socialización perdida?, ¿Cómo logramos influir en su distracción, vida sana y autoeficiencia?, ¿Cómo logramos mantener y facilitar su Fe en Dios en esta difícil etapa?, ¿Cómo mejoramos a través de la arquitectura su calidad de vida?

Ocio en la Tercera Edad
Es un tema en el cual no se ha invertido ni el tiempo ni los recursos necesarios como para darle la importancia que realmente tiene, esta claro que la salud, el cuidado, el techo y las pensiones son temas que no se pueden dejar de lado y están siempre al tope de toda discusión en cuanto se trata de la tercera edad, pero el ocio, con todo lo que conlleva no se a tocado ni se a invertido absolutamente nada en comparación con los puntos descritos anteriormente.

Una vida y un cuerpo sano no dependen solamente de cuidados, atenciones médicas, terapias y rehabilitaciones, sino que de lugares de esparcimiento y relajo, donde puedan sociabilizar y realizar actividades al aire libre que les agraden y distraigan. Lograr salir de la rutina, hacer algo diferente es algo muy importante a la hora de dar energías para seguir adelante, conocer en profundidad a más gente o simplemente tener un espacio ameno para compartir con sus pares

Se busca con este proyecto lograr mejorar y dar algo más de calidad a la última etapa de las vidas de estas personas, ayudándolas a hacer más amena y agradable su estadía en el hogar. Distraerlos, acercarlos a la naturaleza, socializar y mantener la Fe, son los puntos y el enfoque en el cual nos centraremos para dar vida al proyecto.

El Jardín
Será el lugar donde se emplazara el proyecto, debido a sus condiciones de albergar todo el programa necesario para generar el ocio en los ancianos. Esta ubicado centralmente, conectando todos los programas principales a su alrededor, por lo que al ser habitado, se convertirá en el conector principal del hogar. Los elementos que lo compondrán llevaran toda la vida exterior hacia el jardín, de manera ordenada y programada, asignándole usos específicos y establecidos a cada sector, ayudando también a liberar el pasillo de programas no apropiados para el. Además contando con elementos potentes como lo son la virgen y los árboles se generara un espacio limpio y útil, apropiado para distraer y alejar de la rutina diaria.

Descanso de Luz y Sombra
Debido a sus limitaciones físicas, los ancianos no tienen acceso a otros lugares dentro del hogar, ya sea solo recorrerlos, distraerse, rezar o solo generar cambios en la monotonía de la rutina, sino que están completamente limitados a la sombra del pasillo techado que une el comedor con las oficinas del hogar, frente al jardín principal, donde pasan los días contemplándolo.

La ausencia de árboles para aprovechar su sombra y frescura, sumado a la ubicación inaccesible para ellos de la virgen, hace del jardín un lugar poco amigable a su vida y rutina. Con el proyecto se busca generar sensaciones entre luz y sombra, denso y vacío, exterior e interior, plano y vertical, desniveles y alturas, proponiendo un volumen verde y sinuoso, despegado completamente del suelo, que toma una altura respetable, imponiendo su presencia en el largo del jardín. La misma sinuosidad reflejada de los grandes árboles en la cubierta, se repite leve y suavemente en los suelos, para que sean amigables al andar cuidadoso de los ancianos, que sin darse cuenta estarán dentro de los dos grandes vacíos del interior.

La estructura del volumen de cubierta se alza livianamente en los pilares, tal como lo haría el follaje de los árboles sobre sus troncos, acentuándose aun mas esta sensación donde las grandes vigas se fusionan con las enredaderas generando una envolvente exterior compacta, con movimientos naturales, sonidos y texturas.

Viendo el proyecto desde afuera se divisa un gran volumen sólido y denso, sin embargo al ingresar a las plataformas, se habitan dos vacíos verticales, los cuales dan una sensación de interioridad estando en medio del jardín, uno de estos a modo de capilla exterior, donde se encuentra la virgen y el otro al final del proyecto, vacío que aleja y abstrae del hogar y su rutina, con vistas hacia el fondo y los árboles. El proyecto se arma con el juego entre lo exterior, interior e intermedio, que se logra con distintos materiales y texturas, donde a vista general están todos muy compactos, sin embargo se despliegan formando distintos espacios y sensaciones a medida que unos se acerca, conoce, ingresa y finalmente habita el proyecto.